El negocio de Tecnoglass está disparado en Estados Unidos
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El pasado lunes 23 de enero, una hora después de haber lanzado la oferta para colocar bonos a cinco años, por US$210 millones y con una tasa fija de 8,2%, la compañía barranquillera Tecnoglass ya había recibido ofertas por US$357 millones.
La colocación de estos bonos se hizo en 70% entre fondos de Estados Unidos, 22% con fondos de Europa, Oriente Medio y África y el 8% restante en fondos de América Latina, convirtiéndose en la primera emisión internacional de bonos corporativos por parte de una empresa colombiana no financiera.
Este comportamiento de la demanda provocó gran entusiasmo entre los directivos de Tecnoglass. “Fue todo un éxito la colocación”, explica Christian Daes, su presidente, quien semanas atrás había iniciado un intenso road show para explicarles a los inversionistas del exterior las características de esta emisión de bonos corporativos, en una coyuntura adversa generada por el discurso nacionalista y proteccionista del nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, cuyos anuncios no dejan de preocupar al resto del mundo.
El optimismo de Daes se explica no solo por la acogida que tuvieron los bonos entre los fondos estadounidenses, también por la estructura de esta colocación: se hizo a través de los bancos Bank of America Merrill Lynch y de Morgan Stanley, y logró una calificación BA3 por parte de Moody’s y de BB- por parte de Fitch. Nada mal para una compañía colombiana que por primera vez lanza bonos corporativos en los mercados internacionales.
Con estos recursos, la compañía planea prepagar deuda por US$185 millones y utilizar los recursos restantes para proyectos que le permitan consolidar su posición de mercado, que en los últimos años ha tenido un crecimiento vertiginoso.
Solo en los últimos 18 meses la compañía ha realizado inversiones por cerca de US$89 millones, mientras que su generación de empleo pasó de unos 2.500 puestos en 2013 a cerca de 6.000 al cierre del año pasado. En materia de ventas, pasó de reportar ingresos por unos US$150 millones hace cuatro años, a cerca de US$300 millones al finalizar 2016, de acuerdo con los primeros reportes; mientras que el Ebitda pasó de US$25 millones a cerca de US$80 millones el año pasado.
La empresa ya hace presencia en 32 países y en los últimos cuatro años ha logrado aumentos en sus ventas a tasas anuales de entre 25% y 29%. Estados Unidos, sin embargo, sigue siendo su principal comprador en el exterior.
“Estamos llenos de pedidos, de órdenes, de cotizaciones, de trabajo, y con mucha expectativa frente al crecimiento que tendrán algunos mercados claves para nosotros en Estados Unidos y Centroamérica”, explica Daes al señalar que la perspectiva para los próximos años sigue siendo positiva, pese a la incertidumbre que algunos avizoran por la llegada de Trump al poder.
Para Daes, la competitividad alcanzada en la planta de Tecnoglass en Barranquilla le permite a la compañía mitigar las amenazas del nuevo mandatario de Estados Unidos, que ha insistido en elevar los aranceles a productos que se importen a su territorio.
De hecho, la experiencia alcanzada por la compañía en sus exportaciones hacia Estados Unidos le ha permitido identificar nuevos nichos de negocios y mercados. En el primer caso, ya comenzó a ofrecer servicios integrales de instalación de ventanería en construcciones de Estados Unidos –además de vidrios y ventanas–.
En el tema de diversificación de clientes, los avances son evidentes. La compañía ya cuenta con pedidos para este año en Chicago y California, así como en Nueva York, Boston y Washington, que alcanzan US$70 millones. Daes confirma que hasta hace unos años 90% de las ventas de Tecnoglass en Estados Unidos se concentraban en el estado de Florida.
Daes destaca que uno de los temas fundamentales para aumentar las exportaciones tiene que ver con la innovación de los productos, que tienen reconocimiento en el mercado internacional, no solo por su precio sino por su calidad. “El año pasado lanzamos dos líneas de ventanas antihuracanes que han tenido gran acogida en el mercado de Estados Unidos, y acabamos de estar en el Show de Arquitectura de Orlando, donde estos productos fueron un hit”, explica Daes.
La más reciente innovación de la compañía consiste en un vidrio que se oscurece o aclara accionado por un swicht, lo que en su opinión podría generar una verdadera revolución en el diseño de interiores en las oficinas.
La compañía también se precia de desarrollar procesos sostenibles, y para la primera quincena de febrero tiene previsto inaugurar la primera instalación de paneles solares en el techo de su planta de producción en Barranquilla, donde espera generar 3 megas de energía.
Además de fortalecer la gestión comercial y diversificar mercados, Tecnoglass avanza en el cumplimiento de las recomendaciones que el año pasado hicieron sus auditores externos para mejorar la presentación de su información contable, debido a que su acción está listada en Nasdaq.
Atendiendo estas recomendaciones, la compañía realizó a finales del año pasado la adquisición de la totalidad de acciones que tenía en su filial ES Windows, en Estados Unidos, transacción que tuvo un valor cercano a los US$13 millones y en las próximas semanas seguirá un procedimiento similar con la filial que tiene en Panamá, cuyo costo estaría cercano a US$3 millones.
Estas filiales fueron constituidas hace más de una década en estos países, con la participación minoritaria de socios locales, para desarrollar los procesos de importación de los vidrios y ventanería ya que allí los clientes buscaban que los productos fueran colocados en la puerta de sus bodegas u obras, y no en puerto, explica Daes. Por otra parte, la compañía adoptó controles anticontrabando, antilavado y antiextorsión, como los que hacen los bancos.
Los avances en el cumplimiento de las recomendaciones de los auditores le hacen pensar al presidente de Tecnoglass que este año la presentación del informe 10k que hace a la SEC –Securities and Exchange Commission– por ser emisor en Nasdaq, podría aprobarse sin ningún reparo. “En la parte contable hemos incorporado las recomendaciones de nuestros auditores externos y esperamos reportar este año un mes antes de lo previsto, es decir, en los primeros 10 días de marzo”, asegura Daes.
En momentos en que el comercio exterior ofrece un panorama sombrío para muchos productores que exportan a Estados Unidos, Tecnoglass ve un futuro despejado y se prepara para aprovechar las nuevas oportunidades en el mercado internacional, que para sus directivos sigue siendo promisorio.
Fuente: Dinero